Esta carta la escribio Alejandro el 8 de abril de 2007 al conocer el tema de Carlos Fuentealba. Por cuestiones organizativas quedó demorada un par de dias pero la fuerza de su contenido todavia tiene vigencia y por eso la publicamos.
Estoy mirando la foto de la cara de un ciudadano argentino que murio fusilado luchando por sus derechos en la provincia de Neuquén, Carlos Fuentealba. Mi cabeza y mi mente se llenan de preguntas. ¿Hasta cuando? ¿Hasta cuando los que luchan por una causa noble, usta y pacifica encuentran la muerte de esta manera, tan brutal, tan violenta. ¿Es que todavía quedan celulas resentidas de la dictadura que intentan sembrar y restaurar el miedo a todo una sociedad? ¿Restaurar el miedo a un pueblo que se abraza y se une ante las injusticias como las que vivimos este 5 de abril de 2007. Y la que vivimos hace 10 años con Teresa Rodriguez.
A esta altura no me interesa por qué luchaba, ni para qué, ni a que rama política, religión o raza pertenecía. Solo me interesa que asi se murio un argentino más. Solo por luchar por nuestros derechos, por la dignidad y por tratar de ser justo.
Casualidad o no murió un Viernes Santo. Como Jesucristo, para redimir pecados y dar libertad a los hombres y ser más justos y nobles.
Se me llena la cabeza de frases y pensamientos. Y la lapicera con la que escribo no alcanza a plasmar en este papel, mi mente es más rápica. Tantas cosas por decir y que de alguna manera lo puedo sintetizar diciendo que yo también estoy presente y que quería acompañar a sus compañeros, familiares, amigos y colegas porque soy un argentino más y que si me pongo a pensar, esto podría haberle ocurrido a cualquiera de nosotros.
Que el Dios en que yo creo te reciba en su reino y desde alli nos des la luz y la fuerza para seguir la lucha que cualquier argentino necesite.
Pobre de aquel, pobre del alma y espiritu aquel que se cubre y echa culpas en otros, en el afuera, tratando de vanagloriarse para su candidatura a presidente o lo que fuera con szangre derramada. Te pido le le pisas a Dios que no haga olvidar estos hechos corruptibles donde algunos por avaricia y poder creen ser fuertes y son realmente unos cobardes que no dan la cara. Los que se olvidan que en algun momento de su vida se reunieron en una plaza luchando por algo y hoy estan dando vuelta la cara como si esto pasara todos los dias o fuera solo un insulto.
Por favor que este hecho no quede impune. No olviden que la represion ya paso hace tiempo y no dejemos que se vuelva a instaurar. Pareciera que cada tanto el intento de golpismo se quiere confabular con algunos pseudo democratas y son celulas cancerigenas. Pocas, pero peligrosas de la época de la dictadura militar e intentan engañar a la democraci.a
Carlos Fuentealba presente.
Alejandro Casas (Tercero Primera- Cens 44)
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